Les
veía allí, jugando, y me parecía que se había parado el tiempo, que todo era
igual que cuando nos conocimos, parecía que no nos íbamos a separar nunca y
deseé que no terminara ese momento y aunque en el fondo sabía que todos íbamos
a cambiar, algo me decía que seguiríamos siendo amigos, SIEMPRE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario